Contenido del post
¿Qué significa Growth hacking?
Aunque aquí en España sigue siendo una palabra poco conocida tiene sus orígenes en el año 2010. Growth Hacking es una disciplina dentro del marketing conocida por la optimización de los recursos disponibles, Ser Growth Hacker implica un dominio elevado de diferentes áreas del marketing digital. El Growth Hacker es un perfil natural del mundo digital. Esto es así porque el entorno online nos ofrece una amplia variedad de posibilidades y herramientas de marketing gratuítas. Desde versiones free hasta periodos de prueba de 30 días.
Para comprender las técnicas de Growth Hacking debemos tener nuestra mente siempre abierta y ser capaces de detectar cualquier oportunidad de promocionarse al menor coste posible.
La herramienta por excelencia de los Growth Hackers
Desde el punto de vista de los Growth Hackers, las redes sociales son las herramientas por excelencia para desarrollar sus técnicas. A pesar de que presentan ciertas limitaciones (normalmente se pueden suplir con ciertas aplicaciones externas, aunque de pago) si sabemos aprovecharlas es una manera realmente económica de comenzar a generar ingresos.
El Growth Hacking se alimenta del efecto “viral”, por ello las redes sociales son sus grandes aliadas.Una de sus especialidades es la de generar contenido que genere un impulso en la audiencia a compartirlo. Si lo consigue, habrá generado una repercusión enorme sin necesidad de gastar un céntimo, tan solo por el “boca a boca” o mejor dicho el “muro a muro”.
El Growth Hacking & el Contenido Viral
Otra de las técnicas que emplean los Growth Hackers es la de utilizar promociones puntuales que inciten a la difusión. Ofrecer un descuento por compartir una publicación de Facebook, un tweet o por invitar a un amigo, son técnicas que funcionan de forma efectiva como “boosters“. Tienen un efecto turbo, que hace que la audiencia crezca de forma exponencial, ya que cada persona que comparte incita a todos sus contactos a hacerlo para conseguir el mismo descuento. El problema de esta técnica de Growth Hacking es que no se debe abusar de ella. Como potenciadores a corto plazo son buena táctica; pero a largo plazo perderá su efectividad y hará que nuestro público sea mayoritariamente “cazadores de rebajas”, lo que puede no ser siempre interesante para el negocio.
Dedicación: el alma del Growth Hacker
Sin duda, la técnica de Growth Hacking por excelencia es la dedicación. Un auténtico Growth Hacker no toma atajos ni automatiza los procesos. Lo que marca la diferencia a la hora de optimizar los recursos es lo siguiente:
Cuando las personas automatizan el menor trabajo posible es cuando se obtienen los mejores resultados. Aun a costa de los recursos en tiempo que se dediquen.
Recuerda bien esta frase; porque es la que mejor puede definir el trabajo del Growth Hacker,
Para esta disciplina, la analítica conforma una parte importante del éxito. Conocer los intereses y aquello que más efecto provoca en la audiencia. Para ello se basan en Test A/B y en el rigurosos análisis de los datos obtenidos. Los más meticulosos llegan a tomarse el trabajo de visitar uno a uno cada perfil. Algo que puede parecer tedioso e interminable; pero la información que se obtiene es de infinitas veces más valor que una mera estadística. Cuando las personas dejan de ser un dato o un simple número las cosas se ven de otra forma.
¿Y para quién es el Growth Hacking?
Sobra decir que el Growth Hacking no es una técnica pensada especialmente para grandes empresas. Principalmente porque estas ya cuentan con grandes presupuestos que les permiten comenzar con ventaja. El Growth Hacking es una técnica que nace de las necesidades de las pequeñas start-ups con poco capital.
Es la evolución por la supervivencia y el desarrollo de la “inteligencia de la escasez”.